vacio
Al final de todo duele tanto,
despiertas con un dolor en el pecho
que es un recuerdo constante que alguien se ha quedado con parte de tu alma,
abres los ojos agitado,
porque en los sueños has visto su mirada,
porque en tus recuerdos solo quedan sus palabras,
esas mismas palabras que te hicieron añicos
hace menos de una semana,
y que hoy te impiden concentrar
tus esfuerzos en el mañana.
Y es que al final de todo duele tanto,
darte cuenta que como un sueño
todo llega a un punto donde acaba,
donde abres a los ojos
y ya no tienes nada como alcanzarla,
que sus ojos nunca jamás
se volverán a posar sobre tu cara,
que sus palabras ya no volverán
a ser dirigidas a tu alma,
que las promesas que hiciste
resultaron ser completamente vanas,
y que como cualquier ilusión
no soportaron como la realidad las azotaba.
Y es que al final de todo duele tanto,
esa sensación de vacio que agobia tu pecho,
su rostro invadiendo cada segundo de tus sueños,
sus recuerdos llenando los espacios de silencio;
al final de todo duele tanto,
que al final nunca se acaba,
por más que lo intentes queda la marca,
y el volver a respirar se dificulta
cada vez más.
Goran Y. Lausic King View All →
Profesor de Historia y Ciencias Sociales, egresado el 2008, Magister en Historia. Con un gusto y una formación literaria que se remonta a 1998, año en que desarrollé mi primera novela no publicada, y que no publicaré jamás (no está en condiciones).
Mi primera novel publicada fue A diez pasos a la oscuridad, publicada en Amazon, y me encuentro en etapa de diseño de portada para Página en blanco, mi segunda novela. Mientras escribo historia, novelas y demases, divulgo mi trabajo corto (cuentos y poemas, principalmente), por medio de este espacio en la web.
Goran , volveremos a ser los mismos amigos que se conocieron trabajando por un mismo ideal, vamos a volver a reirnos de leseras, vamos a volver a compartir ideas, todo será igual. Sólo deja que pase el tiempo.
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